destacada

A partir de este sábado vuelve a subir la nafta

El Gobierno nacional dispuso un nuevo aumento en los impuestos a los combustibles líquidos y al dióxido de carbono que impactará de lleno en los precios de la nafta y el gasoil a partir de este sábado 1° de noviembre. La medida, publicada en el Boletín Oficial a través del Decreto 782/2025, fue firmada por el presidente Javier Milei y los ministros Guillermo Francos y Luis Caputo, y reconfigura el cronograma de incrementos pendientes para noviembre y diciembre.

En medio del congelamiento de precios que mantiene buena parte de la economía y en un contexto de caída sostenida en el consumo de combustibles, el Ejecutivo nacional avanzó con una nueva actualización de los tributos que gravan a la nafta y al gasoil. Según el decreto oficial, durante noviembre se aplicará una suba parcial en los impuestos a los combustibles líquidos (ICL) y al dióxido de carbono (IDC), mientras que el resto del aumento se trasladará al 1° de diciembre, completando así el esquema previsto en etapas.

Concretamente, la normativa establece que la nafta subirá $15,56 por litro por el impuesto a los combustibles y $0,95 por el tributo ambiental. En tanto, el gasoil aumentará $12,64 por litro, más un adicional de $6,84 para las zonas con tratamiento diferencial —como la Patagonia— y $1,44 por el gravamen al carbono. Estos nuevos montos se sumarán de manera directa al precio final en surtidor, independientemente de los ajustes que luego puedan aplicar las petroleras.

El impacto se sentirá de inmediato, ya que el incremento impositivo tiene traslado automático a los precios minoristas. Así, a partir del 1° de noviembre los automovilistas volverán a encontrar nuevos valores en las estaciones de servicio, en un escenario donde la inflación se mantiene en niveles elevados y el poder adquisitivo continúa deteriorándose.

El decreto justifica la medida en la necesidad de “actualizar progresivamente los montos de los impuestos postergados” y cumplir con la normativa vigente que obliga a su ajuste trimestral. No obstante, el Gobierno mantiene un delicado equilibrio entre la búsqueda de recomponer ingresos fiscales y la presión sobre la economía real, que atraviesa un estancamiento visible en múltiples sectores.

La caída del consumo, un termómetro de la recesión

El retroceso en la venta de combustibles es uno de los indicadores más claros del enfriamiento de la economía. De acuerdo con un informe de la consultora Politikon, las ventas al público de naftas y gasoil totalizaron 1.376.837 metros cúbicos en septiembre de 2025. Si bien mostraron un leve avance interanual de 4,8%, cayeron 3,1% respecto de agosto, acumulando tres meses consecutivos en baja.

El 57% del volumen vendido correspondió a naftas y el 43% a gasoil. Dentro del segmento de las naftas, la premium fue la que más creció —16,2% interanual—, mientras que la súper subió 4,1%. En el caso del gasoil, el premium mostró una mejora de 12,6%, pero el común retrocedió 4%. Esta tendencia evidencia un cambio en los patrones de consumo, donde los sectores de mayores ingresos mantienen la demanda, mientras que la clase media y trabajadora reduce el gasto o limita el uso del vehículo.

Impacto fiscal y social de la medida

Desde el punto de vista fiscal, la actualización de los impuestos a los combustibles representa una fuente de recaudación significativa para el Estado, que busca reducir el déficit primario. Sin embargo, el efecto social del aumento es inmediato y regresivo: no solo encarece el transporte y los costos logísticos, sino que también termina repercutiendo sobre los precios de bienes esenciales, en un contexto donde los salarios y jubilaciones continúan rezagados.

El nuevo incremento se da, además, en un momento en que el Gobierno intenta mostrar señales de disciplina fiscal ante los mercados, pero sin revertir aún los indicadores de actividad y consumo que confirman la recesión técnica. En los hechos, el ajuste de impuestos al combustible termina actuando como un aumento indirecto de tarifas y precios regulados, con un fuerte impacto en la vida cotidiana.

Tendencias

Salir de la versión móvil